Y yo pensaba el otro dia (post q no llegue a subir) q podria estar comenzando a mostrar atisbos hippies por estar lavando mi mooncapsel, vestida con unas calsas batik, con piedritas colgando de mi cuello de una cinta de terciopelo para generar armonia y plumas sobresaliendo de mi cabello, despues de una conversacion de los beneficios de ameroli.
Pero todo eso no es nada comparado con la alegria, libertad, felicidad, completud q senti hoy metiendonos 4 mujeres de todas las edades al mar. No importaba el cuerpo, la edad, nada. Y estar ahi adentro, como dios te trajo al mundo. Correr dsd un extremo d la playa hacia el mar y sentir el agua, el frio, las olas, las risas, los gritos de nosotras 4, felices, sintiendo la naturalidad a flor de piel, fue una de las experiencias mas lindas del año. Vivir por primera vez la desnudez como algo totalmente natural, vivir el cuerpo como lo q es, algo hermoso y q nos permite estar aca.
Era un cuadro perfecto, amaria ser pintora para retratar lo que mis ojos estaban viendo y poeta para describir y volcar en palabras todo lo q sentia, todo ese joy de puro presente.
Esos colores..
Ese azul combinado con la espuma blanca y esos torsos rosaditos, mas blancos, un poco mas arrugados o menos. Esas curvas, esas yoginis con todo tipo de cuerpo. Kafa, pitta y Vata.
Todas las edades, 25, 35, 40 y 60.
Todas contentas, sin complejos de cuerpos, sin competencia. De hecho ninguna parecía interesarle demasiado el hecho de la desnudez. Era natural. Era como tenia q ser. Como el agua de un oceano.
Es indescriptible la hermosura de lo aue estaba viviendo, ese mar, ese cielo, esa arena blanca paradisiaca, las islas rocas a la distancia, el verde de simil montañas y esas 3 mujeres chapoteando en el agua, animandose a sumsegirse en las friAs aguas y divirtiendose con las olas.
Eso, eso es vida.
En todos sus estados, en todas sus formas, en toda su belleza.
