Y yacías bello, plácido y bonito durmiendo.
Yo te contemplaba y acariciaba tus cabellos.
Recorría cada una d las facciones de tu cara.
Trataba d impregnar esto momento x siempre en mi recuerdo.
Y te miraba, deseaba, q no te despertaras q pudiera simplemente contemplarte.
Vislumbrar tus destellos angelicales y tus dones de paz.
Mirarte y recordar...
Tu cara, tus reacciones, tu forma d actuar.. Cuanto diferian con la imagen que recibia d ti momentáneamente.
Y era precisamente esto lo q te hacia tan especial.
Era eso lo q me seducia cada día mas.
Te quería entero, todo para mi, todas tus caras, todas tus formas de ser.
Un ángel y un hombre, un santo y un mundano, etéreo y terrenal; solo como tu sabias ser en cada beso, en cada mirada, en cada caricia en cada respiración, en cada momento q estábamos cerca.
Solo así conmigo. Solo conmigo así.
sábado, 28 de mayo de 2011
Santo y Mundano
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario